27 de
Octubre de 2006 "Necesidades
educativas de los Talentosos y Dotados" Legislatura
de Autora: Mariela Vergara Panzeri Centro para el Desarrollo
del Alto Potencial Buenos Aires - Argentina Expositor del trabajo: Mariela Vergara Panzeri Licenciatura en
psicología Directora del Centro para
el Desarrollo del Alto Potencial Delegada por Argentina de
Paysandú 929 C 1405
ANK T.E. 4583 – 0834 Abstract Necesidades
educativas de los Talentosos y Dotados En toda sociedad y en todos los tiempos, los observadores han notado
que algunos niños parecían aprender más rápido, recordar más, resolver los
problemas más eficientemente que otros. En una terminología corriente aquellos
niños fueron llamados superdotados. Si bien existe una variedad de términos
que las distintas sociedades utilizan para nombrarlos: genios, talentosos,
superdotados, sobredotados, brillantes, etc. en los países latinoamericanos
existe un rechazo, tanto de
los niños/as, adolescentes como de sus
padres, de etiquetar al individuo como “super” dotado. Esta
terminología genera automáticamente una sensación de aislamiento o de extrema diferencia con los otros niños.
Haciendo eco de este rechazo, en Argentina los términos más usados en este
momento son los términos: talentoso y dotado. Se utiliza el término dotado
para definir a aquel que demuestra una alta habilidad intelectual general muy
por encima de la media del grupo de su edad y el término talentoso para
definir a aquel que alcanza una alta habilidad en un área específica
académica o artística, es decir, alcanza un destacado rendimiento en un área
(por ejemplo: talento artístico, lingüístico, matemático, etc.). Para los países
anglosajones, el término equivalente a superdotado en inglés, es el término
“gifted” que tiene una connotación mucho más positiva ya que al
ser traducido es aquella persona “donada” o que ha recibido un
don o regalo. La organización mundial de la salud considera a una persona como dotada cuando alcanza un cociente intelectual de 130 o superior. Es cierto que los tests de inteligencia han sido y siguen siendo muy criticados debido a que evalúan solo la inteligencia convergente, dejando de lado lo convergente. Es por ello que toda evaluación, que tenga como objetivo abordar el talento y la dotación, tendría que ser complementada con Tests de Creatividad. ¿Por
qué los niños/adolescentes dotados y talentosos tienen necesidades educativas
especiales? Sabemos que los contenidos para cada año escolar han sido pensados de acuerdo a la edad cronológica de los niños y a las habilidades comúnmente adquiridas dentro de los parámetros normales. Ahora bien, existen diferencias individuales marcadas entre un niño con altas capacidades y un niño común. Se diferencian en habilidad, intereses, aptitudes y necesidades individuales. Piensan diferente, se comportan diferente, aprenden diferente y tienen un bagaje de conocimientos e información también diferentes. Estas diferencias en la adquisición de conocimientos, en el ritmo de aprendizaje y sus intereses elevados para su edad, generan que sean niños con necesidades educativas especiales. Cuando no se los
atiende en sus necesidades especiales sufren negligencia. Si se los mantiene dentro del grupo de pares
promedio y se pretende que sigan el
ritmo de los niños promedio, se ve que el niño tiende a desarrollar hábitos
de trabajo perezosos y conductas inadecuadas. Aquellos chicos brillantes que están aburridos y frustrados en la
escuela están en peligro, por un lado se pueden rebelar, ser castigados por
ser desafiadores, disruptivos o por hacerse los payasos en clase,
convirtiéndose en chicos problema o por otro lado, se pueden esconder,
volviéndose sus capacidades invisibles en el ámbito educativo. Estos alumnos
pueden tener un bajo rendimiento ya
que aprendieron a rendir por debajo de sus capacidades y llega un momento que
pierden el deseo de aprender. Si nunca tienen que hacer nada que los desafía,
si nunca se esfuerzan, no construyen el hábito de esforzarse para lograr los
objetivos y pueden terminar con frecuencia con habilidades de estudio pobres
y/o inexistentes. En definitiva, cuando un niño siente que sus necesidades no se
satisfacen en la clase, cuando no obtiene la atención que necesita, tiende a
bajar su rendimiento, a interrumpir la clase, a molestar a sus compañeros, a
desafiar los conocimientos de la maestra
e incluso a fracasar en sus tareas y exámenes. Su reacción es debida a
una alta energía contenida, su baja tolerancia a la frustración y la presión
que siente que proviene de sí mismo. En definitiva, necesitan atención de sus
necesidades intelectuales diferentes y existe metodología ya probada para
trabajar con estos niños. Es fundamental,
entonces, buscar las oportunidades educacionales adecuadas de manera que el
niño encuentre sus necesidades intelectuales y pueda desarrollar su
potencial. Aspiramos a que todo niño
concurra al colegio para aprender, pero esto lamentablemente no sucede con
los niños dotados y talentosos ya que nos encontramos en la vida diaria
escolar, con mucha frecuencia, que estos alumnos dominan gran parte de los
objetivos a alcanzar y sienten que no aprender en el colegio, que solo van a
socializarse. La educación debería dar a cada niño lo que necesita y para que
esto se cumpla con estos alumnos, la educación necesariamente debe sufrir
modificaciones, implementar estrategias de atención diferentes para alumnos
diferentes. Pasar de la educación homogeneizante e ir a una real educación
inclusiva heterogénea. Me gustaría citar un
trabajo de investigación que ha realizado CEDAP, Centro para el Desarrollo
del Alto Potencial, con mucho esfuerzo, entre junio de 2005 y mayo de
2006. Si bien no lo tomaremos en su
totalidad, nos parece importante poder extraer algunos puntos. En este
trabajo de investigación “Educación
Actual de niños y adolescentes con Altas Capacidades en Los objetivos generales de la investigación fueron: analizar la intervención
escolar luego de la identificación del talento o la dotación por un profesional, analizar
la intervención de los organismos oficiales, conocer el grado de utilización
de las distintas estrategias educativas para estos alumnos: aceleración y
enriquecimiento. El procedimiento metodológico se basó en una encuesta de opinión que fue realizada a través de
Internet. La población objetivo eran los padres y se aspiró a tener acceso a
lo que sucedía con esta problemática en distintas regiones del país. Las zonas encuestadas, que
vemos en la fig. 1, se distribuyeron de la siguiente manera: el 43% de los encuestados han sido de
Capital Federal, el 39% han sido
provenientes de
Figura 1 Del 100% de los
encuestados, el 78% habían sido evaluados por profesionales psicólogos o
psicopedagogos. (Fig. 2)
Fig. 2
Fig. 3 Para el presente trabajo de
investigación se trabajó solamente con ese 78% que había sido efectivamente
evaluado por profesionales y no se tuvo en cuenta el restante 22%. Nos
interesaba poder analizar que sucedía con los adecuadamente identificados. De ese 78% que tomamos, que
a partir de ahora será nuestro 100%, el 78% eran varones y el 22% era
mujeres. (fig 3) Cuando abordamos el punto
de a qué edades habían sido detectados los chicos, nos encontramos que el 48%
de los niños se encontraban en la franja de edades de Esto nos lleva a pensar
que las edades más apropiadas para la detección son entre los 2 y los 7 años.
Figura 4
Figura 5 Figura
5 Ahora bien, se considera habitualmente
que un niño dotado se mostrará en el ámbito escolar como un alumno destacado
o excelente. Hemos podido comprobar lo que la misma bibliografía no se cansa
de repetir, no todo niño dotado se desenvuelve en el colegio con excelente
rendimiento. Según la investigación planteada, el 36% eran considerados
alumnos excelentes, el 23% alumnos muy buenos. Es decir, un total de 59% son
considerados alumnos de muy buen rendimiento. Pero existe un 15% de alumnos
considerados buenos y otro 15% considerados regulares y un 2% francamente
malos alumnos. (fig. 5)
Figura 6
Figura 7 Encontramos también que la
actitud del colegio ante la identificación realizada por un profesional fue
en un 31% de negar la identificación, considerar que el niño no era tan
inteligente y que había otros como él, el 40% aceptó la identificación aceptó
la identificación y además buscó atender las necesidades especiales de los
alumnos, el 29% si bien aceptó la identificación manifestó la imposibilidad
de atención por ausencia de formación y sobrepoblación áulica. (Fig. 6) Experiencias de intervención en alumnos dotados y
talentosos En a) Organizarán o facilitarán la organización de programas a desarrollarse en los Establecimientos Comunes para la detección temprana, la ampliación de la formación y el seguimiento de los alumnos/as con capacidades o talentos especiales.” (Ley federal de Educación, abril 1993). En San Juan
el 11 de septiembre de 1993 es firmado el Pacto Federal Educativo por el Gobierno Nacional, los gobiernos
provinciales y A partir de esa fecha, en diferentes provincias se han elaborado una serie de documentos sobre este tema. Sobre esta base, “Las disposiciones del presente
Acuerdo Marco se extienden a los alumnos con capacidades o talentos
especiales - art.33, inc. a) de Por otro lado "Las niñas,
niños y adolescentes con capacidades especiales tienen todos los derechos y
garantías consagrados y reconocidos en esta ley, además de su condición
específica. Los organismos
del estado, la familia y la sociedad deben asegurarles el pleno desarrollo de
su personalidad hasta el máximo de sus potencialidades, así como el goce de
una vida plena y digna." Continuando
con el marco legal, el documento elaborado por el Ministerio de Cultura y
Educación de Otro elemento con el que contamos es En La reglamentación del
artículo mencionado de § Proyecto de Ley N° S 1021/98, “Programa de educación especial para alumnos y alumnas con capacidades excepcionales”. § Proyecto de Ley N° D 3628/03 para la creación del “Programa Federal de Atención Educativa para Alumnos/as con Altas Capacidades”. §
Proyecto de Ley N° 2826/06 “Programa Nacional de
Educación para Alumnos con Capacidades y/o Talentos Especiales” Como decíamos previamente,
un niño con altas capacidades sale de los parámetros normales en sus
necesidades educativas y necesita una respuesta distinta a la
convencionalmente dada por el ámbito educativo. Las estrategias que se
implementan con este tipo de alumnos a nivel mundial son de 3 tipos: 1.
Aceleración: que consiste, a grandes rasgos, en admitir al estudiante
tempranamente a un año determinado o en permitirle que avance más rápido que
lo usual a través de los años.
Retomando las estrategias
que se pueden implementar, el país ha tenido experiencias de los 3 tipos
reintervención. 1.
casos en donde se ha
implementado la estrategia de aceleración anticipando el comienzo de la
escolarización obligatoria o bien reduciendo la duración de la enseñanza
general básica por adelantamiento de cursos. 2.
casos donde se ha implementado la estrategia de enriquecimiento en el
aula común. 3.
escuela exclusiva para niños con alta capacidad (agrupamiento total) Retomando la investigación
citada, arroja como resultado que el 69% de los niños debidamente
identificados por un profesional no recibieron ningún tipo de intervención
alguna. Sólo el 31% recibió algún tipo de intervención educativa: el 12% Aceleración,
16% Enriquecimiento, 3% ambas estrategias. En definitiva, si bien a partir de 1992 se
ha apuntado a la concienciación, difusión e intervención educativa en este
tema, aún nos se ha logrado que un número significativo de niños se beneficien
con la intervención más adecuada de acuerdo a su perfil. La lentitud en su
aplicación de estrategias puntuales ante casos puntuales se debe también a la
ausencia de la reglamentación de la ley, sumado a esto la falta de formación
docente sobre el tema desde el estudio de grado. Conclusiones Hoy habiendo
pasado más de 14 años desde la sanción de Si retomamos la
investigación antes mencionada, vemos que las edades más convenientes para la
detección son entre los 2 y los 7 años. (84%). Los padres y familiares son
los principales autores de la detección (77%). El 40% de las Instituciones
educativas, privadas y públicas, mostraron aceptación del diagnóstico y
voluntad de intervención. El 31% rechazó el diagnóstico de talento. El 29%
aceptó el diagnóstico de talento pero manifestó la imposibilidad de atención
por ausencia de formación y sobrepoblación áulica. El 31% dio algún tipo de intervención escolar.
(Fig. 7) Del total de
diagnosticados un 31% recibió algún tipo de intervención educativa: el 12%
Aceleración, 16% Enriquecimiento, 3% ambas estrategias, pero solo el 10% de
los padres estuvieron conformes con dicha intervención. Un 27% de los padres
buscaron apoyo oficial. Un 43% obtuvieron intervención del sector oficial,
pero solo el 14% tuvo una implementación exitosa. Esto nos lleva a afirmar que diferentes instituciones educativas y
organismos oficiales se están empezando a dar cuenta que los niños con altas
capacidades son una realidad que no podemos seguir ocultando y que es preciso
atender. Queda realmente mucho camino por recorrer, y necesitamos: §
Una reglamentación clara para la intervención ante
la identificación de talento o dotación por un profesional, §
El compromiso de las autoridades educativas:
inspectores, jefes e inspectores de área, directores de escuelas, personal
docente para que lleven a la práctica lo que la ley, la reglamentación y las
circulares disponen y sugieren. §
Y el compromiso de las Autoridades Educativas más
altas: Ministro de Educación, Ciencia y Tecnología, Secretarios,
Subsecretarios, Directores de las entidades de Direcciones Generales de
Cultura y Educación tanto nacionales como provinciales, etc. que promuevan la
concienciación, capacitación y la implementación de estrategias para el abordaje
de esta realidad educativa emergente. Sería muy
positivo que 1. Lograr una política educativa comprometida con esta temática donde cada institución, pública o privada, pudiera instaurar la programación de tiempos, espacios y recursos para la detección de los alumnos potencialmente superdotados y talentosos, ya sea al nivel de ciclos o años y sostenerlo como política educativa de atención a la diversidad. 2. El proceso de identificación se implemente desde las propias escuelas para intentar disminuir el número de alumnos que, teniendo potencialidades, quedan sin identificar. 3. Las autoridades tengan en cuenta la identificación a edades tempranas y en el primer ciclo de escolaridad obligatoria para poder iniciar una intervención educativa adecuada y a tiempo de las potencialidades, intereses y capacidades y altas habilidades cognitivas. 4. Una vez alcanzado ese punto promover proyectos escolares para los alumnos superdotados o talentosos identificados. 5.
Y finalmente, y no por estar último deja de ser
primordial, fomentar programas de capacitación docente junto con la
incorporación de esta temática en el estudio de profesorado, como así también
la incorporación de esta temática en los estudios de grado de carreras claves
como Ciencias de Informes gubernamentalesPoder Ejecutivo – Provincia de Buenos Aires (2000). Circular General N° 8. Provincia de Buenos Aires: Dirección General de Cultura y Educación, Dirección Servicios Generales, Departamento Impresiones. Ministerio
de Cultura y Educación de Ministerio de Educación, Ciencia y Tecnología (1993) Ley Federal de Educación. Pacto Federal Educativo. Buenos Aires: Departamento impresiones. Ministerio
de Cultura y Educación de
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